martes, 26 de abril de 2011

Camino de Santiago


Se terminó la aventura, la experiencia ha sido impresionante. No sé muy bien cómo ordenar la cantidad de cosas que me han pasado en 6 días. Lo mejor del camino, para mí, es que cada día fue distinto al anterior. Iremos día a día:

1.- Burgos - Castrojeniz: 41 km
Llegué en bus a Burgos a las 3:45 y empecé a andar. Era noche cerrada y tenía por delante más de 40km que completar. Los primeros 20 fueron muy buenos, buen ritmo y piernas respondiendo muy bien. A partir de ahí empezó el calvario, los últimos 10 era un cadáver andante: dolor de pies, ampollas, cansancio y pensamientos de abandono continuamente...

A destacar: haber sido capaz de aguantar, no sé si porque no quedaba más remedio o porque me veía capaz. Fueron 10 horas seguidas caminando solo todo el tiempo.

2.- Castrojeniz - Frómista: 25km
Segundo día mucho más corto, con muy buenas sensaciones tras el día anterior. Conozco a una familia catalana que me acompaña (o más bien les acompaño yo) durante unos 15-20 km. Ir hablando hace que el camino sea mucho más corto y fácil. Eso sí, los últimos 5km, solo otra vez, se hacen eternos.

A destacar: ir acompañado y disfrutar del camino y la gente. Descubro compeed ampollas ese día...luego volveremos con eso.

Flechas amarillas de todos los tipos. Esta me gustó especialmente

3.- Frómista - Carrión de los Condes: 18km
La etapa más fácil del camino según leí en mi guía. Para mí, aún con ampollas en los pies, se hace dura al final, también por saber que es corta e ir con el chip de q seria fácil. Etapa de transición, sabiendo q las siguientes 2 serán largas (40 y 36km). Al llegar me quito las ampollas -toda una experiencia...desagradable- y me pongo compeed ampollas. Ese día además conozco a Karmele, una chica vasca q me acompañó hasta el final.

A destacar: conocer a Karmele, que aunq probablemente nunca lea esto, fue una gran compañera de viaje. Desde q la conocí hasta el final fueron los mejores momentos.

4.- Carrión de los condes - Sahagún: 40km

Etapa larguísima otra vez. Pero gracias al compeed los pies van mejor hasta el km30. Karmele y yo fuimos a un ritmo bestial, 5km/hora (parece una mierda, pero aguantar ese ritmo 6 horas seguidas es la hostia). Llegados al último pueblo antes de Sahagún yo paro a comer y Karmele sigue. Al arrancar de nuevo voy muy mal, quedaban 8 km y los pies empiezan a doler mucho. Me estaba arrastrando y conocí a Miguel, otro vasco de 38 años.

A destacar: Miguel, todo un personaje. Hace el camino porque su mujer le dijo q no tenía huevos para hacerlo. El asume el reto y decide hacer TODOS los caminos (francés, portugués, del norte, de la plata y alguno más q se invente él mismo, dicho por él). Un tío siempre optimista, sonriendo todo el rato y buena gente.

5.- Sahagún - Mansilla de las Mulas: 36km

En compañía de Miguel y Karmele se hace muy fácil el camino. Vamos a buen ritmo, echando unas risas y conociendo gente. Es la mejor etapa sin duda pese a ser bastante larga. Karmele va peor porque no está haciendo su plan, sino el mío y el de Miguel, llegar a Mansilla.
A destacar: al llegar a Mansilla coincidimos con un grupo de 4 chicas vascas de 20 años. En el albergue voy coincidiendo con muchos conocidos de otros días y es una de las cosas más bonitas con las que me quedo.

6.- Mansilla de las Mulas - León: 18km

Última etapa, corta, sonrisa en la cara y alegría general. Karmele y Miguel también acaban en León y vamos todos con el mismo buen humor. Ver León por primera vez es la hostia, alegría por todos lados y disfrutando los últimos km. Hubo dudas de poder llegar hasta el final, fueron 180 km en 6 días y se está cumpliendo el plan. Saber q he seguido el plan perfectamente me sube la moral a tope. Haber sido capaz de caminar más de 45 horas y de aguantar las sensaciones de cada día es inolvidable.

A destacar: la llegada a León y toda la tarde y noche. Al llegar vimos la última procesión de semana santa, y al acabar empezó la fiesta. 10 horas bebiendo cerveza (tapa incluida) y sumando gente al grupo. Empezamos Miguel, Karmele y 2 amigos suyos que estaban en León de vacaciones, y acabamos un grupo d 11: las 4 vascas del día anterior, un portugués profesor de yoga y un italiano camarero que había vivido en Las Palmas. Fue tremendo, risas y buen rollo toda la tarde. Destaco a Ana, una de las chicas vascas que probablemente haya sido la persona que mejor recuerdo me ha dejado de todo el camino.

En otra entrada hablaré de las sensaciones y haré un resumen de cómo fue a nivel general.

Lo que es seguro es q habrá segunda parte, y espero que sea como muy tarde la próxima semana santa.

jueves, 14 de abril de 2011

Última entrada pre Camino

Esta última semana ha sido una locura. Apenas he tenido tiempo libre y hoy, por fin, puedo dedicarle un rato a escribir.

El fin de semana pasado fue muy intenso. El viernes, al salir del trabajo, me fui a la playa con mi entrenador, Xavi de TriTraining, y algunos miembros del club al que me apunté cuando empecé con Xavi, los Barcelona Dragons. Fuimos nadar en aguas abiertas, práctica de natación en grupo y con neopreno. Nunca había nadado con neopreno antes, y la verdad es que es más cómodo de lo que pensaba. Eso sí, el agua estaba tan fría que al entrar no sentía los pies.

Debut en natación en aguas abiertas con neopreno. Soy el de abajo en el centro de la foto, con gorro negro
La experiencia fue muy buena. Nadar en piscina no tiene nada que ver con nadar en el mar. Hay miles de diferencias, pero la principal para mi es la falta de referencias para orientarte. En la piscina está el fondo, que te va guiando para poder ir recto, pero en el mar no hay nada que te sirva para orientarte bajo el agua, hay que ir levantando la cabeza con frecuencia para ir lo más recto posible y evitar así nadar muchos metros de más. Además están las corrientes, las olas, el ir con neopreno, el agua salada, el nadar con gente a los lados, por delante y por detrás, etc. Con todo, lo mejor es ir acostumbrándose a nadar así, porque en competición será mucho peor. He oído por ahí incluso que hay gente a la que pasan por encima en el agua... pero esto ya lo viviré en mi debut triatlético.

Dejando de lado el triatlón, me quedan 4 días para empezar el camino de Santiago. El lunes por la tarde salgo de Barcelona en bus (guagua en mi tierra) camino de Burgos. Llego allí sobre las 4 de la mañana y empiezo a caminar en dirección Castrojeriz, 40 km para empezar. Serán en total 6 días y 180km.

No sé qué responder cuando me preguntan por qué hago el camino, es una mezcla de muchas cosas

Cuando la gente se entera de que voy al camino yo solo las reacciones son muy curiosas. Algunos me dicen que por qué voy solo, otros que si voy solo para reflexionar o para conocerme a mi mismo, y otras muchas respuestas. La verdad es que no es por ninguna de ellas en concreto y por todas a la vez. No tengo un motivo que pese por encima de otros. Voy por vivir la experiencia, por demostrarme a mi mismo que puedo viajar solo, por conocer a gente nueva, y porque me apetece mucho. Todo lo que he escuchado del camino es bueno, lo único negativo es la dureza, las bolsas en los pies y demás. Por todo eso creo que es una buena oportunidad de experimentar cosas nuevas y, una vez más, perder el respeto a las largas distancias.

Iré contando qué tal va el camino, me podrás seguir en twitter @Carlospera85

Saludos, kilómetros y Buen Camino!

miércoles, 6 de abril de 2011

Materiales y costes

Desde que la idea del triatlón empezó a tomar forma he descubierto el coste que supone ser triatleta. Como en cualquier deporte, a medida que te vas sumergiendo van apareciendo complementos, materiales y accesorios que hasta la fecha o ni conocías o te parecían absolutamente prescindibles. Cuando pasan a ser imprescindibles empiezan los problemas...


Para hacer triatlón no hace falta gastarse mucho dinero. La verdad es que bastaría con tener una bici de carretera normal (de segunda mano se pueden encontrar a buen precio), un neopreno para nadar cuando se permite y unas buenas zapatillas para correr. Esto es lo básico e imprescindible para un triatlón (el neopreno es prescindible siempre y cuando no se compita en aguas muy frías o seas un machote que aguanta el frío). Por tanto, no se necesita demasiado, ni hace falta gastarse mucho dinero.


Esta es mi bici, una Aqua T23, gama básica
Pero aparecen los accesorios. El más importante podría decir que es el pulsómetro, para controlar el esfuerzo y saber dosificar. Los hay, cómo no, de muchos tipos y precios. En Decathlon se pueden encontrar por menos de 20€, pero los hay con GPS integrado y pueden subir de 300€. Luego tenemos todo tipo de accesorios para cada deporte. Para nadar, además del neopreno están los gorros, palas y aletas para entrenar, bañador, gafas (hay especiales para triatletas con visión más amplia), etc. En la bici tenemos las zapatillas, las calas, el casco, el bidón, las ruedas especiales, cuernos, etc.. y el gran desconocido para mi hasta hace poco: el medidor de potencia. El medidor de potencia, después de mucho leer sobre él, es un buen compañero de viaje. Para explicarlo de forma sencilla es un buen medidor del esfuerzo que estás realizando en el momento, en cada pedalada, lo que te permite marcar un ritmo y generar una potencia determinada durante un entrenamiento o en carrera. En las bicis estáticas (no las de spinning) es una de las variables que se pueden medir. No profundizo más en el tema porque daría como para otro post, y además tampoco soy experto en medidores de potencia. Y por último la carrera, que lo más caro son las zapatillas, pero tenemos camisetas, pantalones, calcetines especiales, chaquetas, etc.


Yo por ahora me he gastado bastante dinero. La bici se ha llevado aproximadamente el 70% de todo el gasto, pero lo que queda por delante dependerá del grado de implicación y motivación que tenga.


Lo que me tranquiliza es saber que, en realidad, cualquier deporte/afición cuesta mucho si te la tomas muy en serio o si te sumerges a tope. De todas formas, la ilusión de comprarte algo y las ganas de estrenarlo cuanto antes compensan, con mucho, el dinero que cuesta...

viernes, 1 de abril de 2011

Camino y primeras competiciones

Bueno, hoy toca hablar de los primeros proyectos y competiciones, algunos fuera de lo que es el triatlón.


Llevaba mucho tiempo con ganas de hacer el Camino de Santiago. Conozco a varias personas que ya lo han hecho y todo el mundo coincide en que es una gran experiencia, en que vale mucho la pena hacerlo. La principal duda era, solo o acompañado?? Nunca he viajado solo, pero la idea siempre me ha apetecido mucho, y todo lo que leo apunta a que es la mejor manera de hacer el camino. Por tanto, decisión tomada: Camino de Santiago solo. Y más vale solo que mal acompañado...


Aunque vaya solo sé que no estoy solo, aunque me pasaré muchas horas conmigo mismo


Esta decisión la tomé en Octubre del año pasado, Camino de Santiago solo en Semana Santa de 2011. Según se ha ido acercando la fecha se ha ido complicando la cosa, básicamente por los problemas de rodilla que he venido arrastrando desde Noviembre. Hace sólo unas semanas parecía más que probable que me tuviese que operar, aunque eso ha cambiado y ahora parece ser que no hay nada grave y no será necesario pasar por el quirófano. Por tanto, la semana pasada me decidí a comprar los billetes de bus para hacer el tramo Burgos-León del Camino. Por qué ese tramo? Fácil, son justo 6 etapas, entre 2 ciudades suficientemente grandes como para tener conexión directa con Barcelona, y acabo en León, donde empieza el tramo más común del Camino (León-Santiago), que algún día haré para completar mi particular camino en dos tramos.


En resumen, del 19 al 24 de Abril completaré 180km andando, una media de 30km/día y todo yo solo. Diría los motivos por los que hago el camino, pero llevo ya demasiados posts profundos como para eso...me apetece mucho y será la primera experiencia de larga distancia que tengo, aunque sea andando. Espero que me sirva, entre otras muchas cosas, para perder el respeto a las largas distancias.


Durante días sólo veré señales como ésta y conchas, muchas conchas


Volviendo al mundo triatlético, como empiezo a ver la luz al fin, veo el inicio de temporada mucho más cercano. Está tan cercano que podría ser el 8 de Mayo, un tri corto que sería mi debut como triatleta, un buen entrenamiento de transiciones. Serían 800m nadando en lago, 10km con mountain bike y 3 corriendo. Todo esto en un pueblo de Girona, el Tri de Ventallo. La siguiente prueba sería ya en Julio (salvo adelanto de calendario por parte de mi entrenador Xavi), en el Triatlón de la Vila, un tri sprint (750m nadando, 20km bici y 5 corriendo).


Tendré que llevar la L en mis primeras competiciones para que me comprendan...


De momento ya tengo la inscripción para el de Julio, el de Ventalló veremos si llego en condiciones de hacerlo según cómo evolucionen rodilla y muñeca...


Por ahora el objetivo es completar el camino, que quedan 3 semanas y mucho por caminar